Gracias al enfoque propuesto por Fraser es posible entender el problema de niños de y en la calle desde un enfoque destinto al del reconocimiento presentado por Tyalor. En este enfoque planteado por Nancy Fraser el problema se encontraría estrechamente ligado al status (sin dejar de lado el tema del reconocimiento que el status también abarca), ya que sería este status el que provocaría problemas y desigualdades en el reconocimiento de cierto grupo o persona en particular, como también en la distribución de riquezas y en el poder ejercido. Lo que sin duda alguna acarrearía consigo distintos tipos de discriminaciónes y subordinaciones en la esfera de lo social, es decir de lo público. Tal subordinación generada por la desigualdad no es tan sólo algo meramente dialógico, ni tampoco se da de manera exclusiva en el interactuar, sino que además de ello se trataría de una desigualdad de status, la cual estaría "enraizada" de manera institucional.
De acuerdo con el modelo del status, la falta de reconocimiento no se transmite por medio de representaciones o discursos culturales que circulan libremente. Es perpetrada, tal y como hemos visto, mediante modelos institucionalizados; en otras palabras, por medio de las instituciones sociales que regulan la interacción de acuerdo con normas culturales que impiden la igualdad. (Fraser, 2006, p. 62).
Tras ello se desprende que quienes no son parte de dicha "igualdad" que ha sido avalada y estipulada institucionalmente, serían también imposibilitados de participar en la sociedad, por constituír precisamente aquello que no es igual, que no estaría dentro de la norma que se ha instaurado, siendo en este caso particular, los niños de y en la calle los "desfavorecidos herederos" de un sistema que se reconstruye a diario, debido a la dominación social que no se apoya en politicas basadas en el status social para generar cambios.
Walzer (2001) señala:
El fracaso les persigue de esfera en esfera, manifestándose en forma de estereotipos, de discriminaciones y desprecios, de tal modo que su condición no es, de hecho, el resultado de una cadena de decisiones autónomas, sino la consecuencia única de una sola decisión del sistema o, en su caso el efecto de una secuencia de decisiones vínculadas entre sí. En cuanto a los niños, es patente que heredan la exclusión. Las caracteristicas individuales, que, se supone, son las verdaderas responsables de la exclusión (y que pueden legitimar su existencia), son en realidad el producto de la exclusión misma. (pp. 137)
Basándonos en ambos autores es posible construír un discurso que nos muestra tanto las causas de la subordinación y dominación social, como también los efectos que conllevan. Los efectos que consigo traen políticas deficientes son los mismo que ha
planteado Fraser los que desplazarían la lucha de la redistribución económica a un plano más simplista; el reconocimiento, como también reificaría ciertas identidades de grupos promoviendo el separatismo entre los mismos grupos. Esto produciría a su vez una distinción como hemos expuesto ya entre "ellos" y "nosotros", toda definición de un <
Por lo tanto es posible entender el problema de niños de y en la calle según los postulados de Freser, como un problema basado netamente en que las causas de que tal situación ha sido construída con postulados basados en el reconocimiento, que no haría más que nublar las luchas por la redistribución, como así también en bases que reifican las identidades de grupos. Por lo que como bien propone Fraser la política del reconocimiento deberá orientarse a la igualdad de status. Lo que precisa de reconocimiento no es la identidad específica de grupo, sino el status los individuos en tanto plenos participantes en la interacción social. (Freser, 2006, p. 67) y al ser sujetos considerados por la sociedad, como parte constitutiva y activa de la misma, éstos podrán ejercer junto con tal condición (la de ciudadanos) los derechos negados hasta ahora, por pertenecer a ese segemento excluído de la sociedad.
Referencias
Fraser, N. (2006). Nuevas reflexiones sobre el reconocimiento, p. 62.
Mouffe, Ch. .(1999) El retorno de lo político. Buenos Aires: Ediciones Paidós.
Walzer, M. (2001). Guerra política y moral. Madrid: Ediciones Paidós
No hay comentarios:
Publicar un comentario